Diciembre 16, 2012
Andrés Martínez Mural (16 diciembre 2012).- Para
que los esfuerzos realizados desde hace cinco años por el Comité
Estatal para la Protección Ambiental de los Humedales de Jalisco
(CEPAHJ) puedan transformarse en resultados positivos, urge que el
Gobierno Federal ponga de su parte y aporte los recursos necesarios.
De acuerdo con la Secretaría
del Medio Ambiente para el Desarrollo Sustentable (Semades), para poder
realizar las actividades de restauración, conservación e investigación
que requieren los humedales que hay en la entidad, se necesita la
conformación de una bolsa económica que lo financie.
Según Antonio Ordorica Hermosillo, director de Planeación Ambiental y
Desarrollo Sustentable de la dependencia estatal, al menos en el caso
de los 13 humedales de importancia internacional que fueron inscritos en
la Convención Ramsar, los recursos tendrían que venir de la Federación.
“Si el Estado Mexicano se comprometió con la Convención Ramsar, es en principio el Ejecutivo federal el que tendría que hacer frente a esos compromisos internacionales, en principio”, comentó.
“El gran tema es que no ha habido una bolsa económica para atender de manera estratégica las necesidades apremiantes de los humedales”.
El funcionario estatal destacó la importancia de destinar recursos para la conservación de los humedales, pues a diferencia del sexenio pasado, actualmente ya se cuenta con comités locales y programas de manejo en vías de ser publicados, que permitirían hacer un uso más eficiente del dinero.
“Ya hay una coordinación a nivel estatal con diferentes instituciones académicas, de la sociedad civil y de las propias instituciones gubernamentales, trabajando en objetivos comunes”, expresó.
“Se está dejando una base de organización local para que los instrumentos de los programas de manejo que vamos a empujar, que de verdad sean observados por los actores (…) estamos dejando muchas bases muy importantes para la nueva Administración”.
En noviembre pasado MURAL publicó que debido a la falta de recursos económicos y a que carecían de un cuerpo técnico o medidas especiales de conservación, 12 de los 13 humedales jaliscienses que están inscritos en la Convención Ramsar padecían por diversos tipos de problemas ambientales.
Entre otras cosas, los humedales registran contaminación industrial, doméstica y agrícola, así como deforestación, caza y pesca irregular, desvío de los cauces que los alimentan, así como asolvamiento e invasión del vaso lacustre.
“Si el Estado Mexicano se comprometió con la Convención Ramsar, es en principio el Ejecutivo federal el que tendría que hacer frente a esos compromisos internacionales, en principio”, comentó.
“El gran tema es que no ha habido una bolsa económica para atender de manera estratégica las necesidades apremiantes de los humedales”.
El funcionario estatal destacó la importancia de destinar recursos para la conservación de los humedales, pues a diferencia del sexenio pasado, actualmente ya se cuenta con comités locales y programas de manejo en vías de ser publicados, que permitirían hacer un uso más eficiente del dinero.
“Ya hay una coordinación a nivel estatal con diferentes instituciones académicas, de la sociedad civil y de las propias instituciones gubernamentales, trabajando en objetivos comunes”, expresó.
“Se está dejando una base de organización local para que los instrumentos de los programas de manejo que vamos a empujar, que de verdad sean observados por los actores (…) estamos dejando muchas bases muy importantes para la nueva Administración”.
En noviembre pasado MURAL publicó que debido a la falta de recursos económicos y a que carecían de un cuerpo técnico o medidas especiales de conservación, 12 de los 13 humedales jaliscienses que están inscritos en la Convención Ramsar padecían por diversos tipos de problemas ambientales.
Entre otras cosas, los humedales registran contaminación industrial, doméstica y agrícola, así como deforestación, caza y pesca irregular, desvío de los cauces que los alimentan, así como asolvamiento e invasión del vaso lacustre.