diciembre 7, 2012
Ramón Rivas Uribe/Milenio
Celedonio Monroy Prudencio, líder indígena nahua, fue secuestrado el
23 de octubre pasado y hasta ahora se desconoce su paradero. Tiene 37
años, estudió la licenciatura en Administración Pública; se ha destacado
por ser un defensor de su territorio en contra de empresas madereras y
talamontes clandestinos que operan en la sierra de Manantlán. Su esposa
denuncia que no se ha brindado protección a su familia y que realmente
no se ha investigado
Foto: cortesíaMonroy Prudencio es un indígena nahua que representa a su comunidad ante el Consejo de Mayores en Ayotitlán
Celedonio Monroy Prudencio, desde el
pasado 23 de octubre, fue secuestrado por un grupo de hombres
encapuchados en su domicilio, ubicado en un caserío cercano a Telcruz,
una de las cabeceras del ejido de Ayotitlán de la comunidad de Loma
Colorada, municipio de Cuautitlán de García Barragán, Jalisco; hasta
ahora se desconoce su paradero.
Monroy Prudencio es un indígena nahua que
representa a su comunidad ante el Consejo de Mayores en Ayotitlán. Se
ha destacado por ser un defensor de su territorio en contra de empresas
madereras y talamontes clandestinos que operan armados dentro de la
Reserva de la Biósfera Sierra de Manantlán.
Nació en la
comunidad de Los Sauces el 3 de marzo de 1975. Egresó en 2005 de la
licenciatura en Administración Pública por la Universidad de Colima.
Como estudiante se distinguió por su activa participación en la
institución educativa. Fue jefe de grupo en la carrera, integrante, en
varias ocasiones, de los comités de Sociedad de Alumnos de la Federación
de Estudiantes Colimenses (FEC) en la Facultad de Ciencias Políticas y
Sociales, también formó parte de la Asociación Nacional de Estudiantes
de Ciencias Políticas y Administración Pública (ANECOAP). Se ha
desempeñado en diferentes secretarías del Comité Directivo de la
Juventud Popular Revolucionaria de la CNOP del PRI. En la recién
concluida administración municipal de Cuautitlán de García Barragán
formó parte del Consejo Estatal Indígena, en representación de la
comunidad Loma Colorada.
Activistas y defensores de derechos
humanos, además de los Congresos de Jalisco y Colima, han enviado
exhortos a las autoridades estatales y federales para que se conozca del
paradero del luchador social. El pasado 22 de noviembre, el pleno del
Congreso local aprobó solicitarle al procurador, Tomás Coronado Olmos,
acelere la investigación sobre la desaparición. Además, se formó una
Comisión Especial para dar seguimiento a este caso, la cual presentó un
informe ayer (ver Ciudad y Región, página 11).
En la misiva que hace un mes las
organizaciones civiles hicieron pública, piden al gobernador Emilio
González Márquez, a la Procuraduría General de la República, la Comisión
Nacional de Derechos Humanos, la Procuraduría General de Justicia del
Estado de Jalisco y la Comisión Estatal de Derechos Humanos.