José
Casillas
Comunidad
Indígena de Ixcatlan
La construcción de
saberes
Los
saberes también se construyen entre y con la gente del campo, en su interacción
con los citadinos o entre los mismos pueblos campesinos. Antes de que existiera
la escritura los saberes se transmitían oralmente, luego se hizo mediante
grabados en piedras, cuevas, maderas duras y otros materiales que pudieran
transitar por el tiempo. Lo buenos es que ahora lo podemos hacer en forma
digital para imprimirlo o transmitirlo a miles en unos instantes. Más, solo
cambian las formas de transmisión, el conocimiento hay que sembrarlo,
cosecharlo y compartirlo.
Entre
los pueblos de la barranca del río Santiago, las bondades de las plantas
medicinales, insecticidas y comestibles se siguen transmitiendo oralmente y se
hace en transito o cuando se tiene en mano la planta o parte de ésta, igual se
da a conocer donde se localiza de manera natural, cómo es su raíz, tallo, flor
o fruto de contar con éste, cual es su periodo de floración, cómo se reproduce,
qué cuidados requiere, si tiene depredadores naturales, en fin, tanto que se
puede decir de una planta incluyendo si está en peligro de extinción.
Preguntas
parecidas nos hacemos para el caso de los animales silvestres, qué bondades le
aportan a la naturaleza, cómo se reproducen y cuándo, qué comen, dónde viven, cuáles
son sus depredadores naturales, si tiene uso comestible entre los campesinos y
si corre peligro de extinguirse.
En
ese andar cotidiano de cara al paisaje, podemos distinguir los pisos ecológicos,
las plantas y animales microscópicos y poco perceptibles al ojo humano, los
arbustos y animales pequeños que viven entre éstos y los animales de mayor
tamaño y arboles con varios metros de altura.
Otro
aspecto tiene que ver con la belleza, sus colores, aromas, matices, alturas,
textura, sombra y aporte de las plantas al contexto natural y social. Asimismo
los animales tienen colores y formas caprichosas, asociaciones místicas, usos
medicinales, sin olvidar a la fauna microscópica, o la muy pequeña que trabaja
el suelo para que se siga conservando fértil al menos en tres pisos.
Los
minerales forman también parte de lo que miramos cuando nos echamos al camino,
distintas durezas, olores, textura, usos, formas, asociaciones ideográficas y
religiosas de montañas, piedras, cuevas y cañadas. Poco importa si la piedra es
valiosa en el mercado, o si alguien quisiera comprar mineral.
Descripción de los Senderos
¿Qué
es un sendero?
Un
sendero es un camino en el paisaje rural por donde transitan las personas y
animales domésticos. Un sendero no es el atajo, ni la vereda que usa la fauna
silvestre, el sendero se transita por los sujetos sociales. En nuestra región,
es un trazo que generalmente va en forma paralela a la barranca del río, aunque
los hay también verticales.
¿Qué
utilidad comunitaria tiene?
Además
de que sirve para transitarlo de un punto a otro de la geografía de la
barranca, a pie, a caballo o en otro cuadrúpedo, nos va mostrando lo que hay en
el entorno, plantas, animales, minerales, colores, alturas, texturas, aromas,
vientos, posición de los rayos del sol, temperatura, altura y la energía con
sus matices, etc.
El
sendero es una fuente y abrevadero de conocimiento comunitario que te va
conversando conforme caminas. El que camina le lanza preguntas dispersas al
sendero, y el sendero te las va respondiendo, así mientras se camina se
pregunta, igual a una roca, a un gran árbol, a un diminuto insecto, a una marca
del acantilado, a un persona que se cruce en los puntos de la comarca.
Ese
caminar preguntando no solo se hace entre sujetos y el medio sociocultural,
también se hace entre los sujetos con el entorno natural.
Un
sendero es un pretexto dialógico que acrecienta los saberes y organiza las
ideas; una maravillosa composición del entorno natural con el sujeto social.
Bajo
estas consideraciones, los siete senderos que se describen a continuación, son
un buen pretexto para recorrerlos mientras les cuestionamos, tienen como punto
de partida La Casa Comunal “Agapito Rico” de Ixcatán.
UNO.-
Peña Alta-El Balcón.
Durante
unos siete kilómetros, nos comparte el paso al pie de los acantilados que son
utilizados para escalar, es un caminar horizontal al norte de Ixcatán que
concluye en las huertas de mango del El Blacón, que se sacian con los
manantiales de agua tibia que nace del cerro e irriga las huertas de mango.
Tiempo aproximado de recorrido a pie, cuatro horas con todo y retorno.
DOS.-
Los Planes-Río La Soledad.
Ya
en el corazón de la barranca, se camina por la brecha que conduce a la Soledad,
también al norte de Ixcatán, y el sendero se troca en dos, uno hacia la parte
baja de la desembocadura del río La Soledad con el Santiago que nos permite
presenciar las cascada, las ruinas de la
primera y única fábrica que ha habido en la barranca, los geiser y la forma en
que el agua limpia se mezcla con el agua contaminada del río Santiago. Mientras
La Soledad tiene pesca y te puedes bañar en él, el grande de Santiago apesta y
hierbe en desechos tóxicos 35 kilómetros más allá de Guadalajara. El otro sendero
hacia la parte alta nos lleva al vado del río La Soledad y hasta con Los
Larios, espacio que nos permite reconocernos en el sonido del agua, en su zarco
color, en las piedras lisas y los huertos que se irrigan en su rivera. Tiempo
de recorrido cinco horas, con todo y retorno.
TRES.-
Piedras Topadas- Mirador de la Cruz
Tres
piedras tepetatosas es la referencia de que comienza el ascenso desde los 1250 msnm hasta los 1500 msnm,
sendero que nos ayuda a conocer el cambio súbito de vegetación de una altura a
otra, una vez en la cumbre, podemos sentir las corrientes de aire, mirar el
bosque a distancia, observar el mapa del
sistema de producción frutícola, a Ixcatán y sus tejados, los senderos, la
carretera federal, así como la barranca del río Santiago en todo su esplendor. Con
un tiempo de recorrido a pie de cuatro horas.
CUATRO.-
El Potrerillo-El Rincón.
La
salida es sencilla y amena sobre un tramo de camino real de tiempos de La
Colonia, se pasa luego por el manantial de la Presa y comienza un ascenso hacia
el suroeste desde donde se divisa el crucero de la carretera que va a Saltillo
y parte de la barranca. Abajo el ruido de los motores, arriba el suave andar de
los reptiles y sus emisiones de sonido, los cánticos de las aves y las voces
que salen de las plantas cuando el viento las provoca. El recorrido concluye en
El Rincón en una pequeña huerta al pie de unos acantilados. Tiempo de recorrido
de tres horas con todo y retorno.
CINCO.-
Piedra grande-Pie de la Cuesta (río Santiago)
Una
vez ubicados en la cancha de futbol inicia el descenso, pero antes hay que
pasar por el sitio arqueológico Piedra Grande que contiene un patio ceremonial
y pictografías, así como un mirador de la barranca, envidiable para quien pueda
trepar a sus alturas. El descenso nos traslada hasta el fondo de la barranca a
los márgenes de río Santiago, que aun poseen enormes ahuehuetes y huertas de
mango, cocuixtle, guamúchil y ciruelo, que se resisten a morir ante tanta
podredumbre que viene de la ciudad. Tiempo de tres horas en el recorrido.
SEIS.-
Por el pueblo (murales, sitio arqueológico Piedra Grande, Camino real)
Se
hace una breve referencia del mural de Gustavo Chávez Pavón pintado en la Casa
Comunal “Agapito Rico”, luego al edificio de la telesecundaria para observar una
obra comunitaria en un muro de 115 metros cuadrados, en diez minutos ya se pisa
el patio ceremonial de La Piedra Grande y (los que así lo deseen) suban a la
parte alta del basalto mayor que contiene por su parte este pictografías que se
presumen del período neolítico. Ahí regreso al poniente, se pasa por una casa
con huerto típico que posee más de 50 plantas diferentes que conviven sin
problemas (casa de Espitación Lomelí) para concluir en el camino real que lleva
al manantial La Presa bajo los arboles de mango y anona. Tiempo de recorrido
dos horas.
SIETE.-
Zona húmeda (Camino Real-La Presa-Acatenco-El limoncillo)
Se
parte de la huerta en donde se pueden apreciar más de media centena de plantas,
luego se transita el camino real mientras se va dando una explicación histórica
de la importancia de esa vía de comunicación hasta muy entrado el siglo XX, se
conocen algunas plantas que se sacian con agua del manantial La Presa, de ahí
se conoce el manantial de Acatenco de los Saldaña, se puede observar una huerta
típica de mango y un cultivar de nopal verdulero y se regresa por El Agua
Salada sobre el ingreso principal de Ixcatán desde el sur. Tiempo de recorrido
una hora y treinta minutos.
POR
LA NOCHE. Recorrer los senderos siete y ocho, es una experiencia que nos aviva
los sentidos, escuchas la travesía del viento mientras se eleva sobre el
acantilado, la brillantez de la peña ilumina el andar de los roedores, es común
escuchar las lechuzas, murciélagos, tecolotes, grillos, alacranes, víboras y
las voces distintas que emiten las ramas y hojas de las plantas. Muchas
preguntas.
Transectos vivos
sujetos atentos
¿Qué
es un transecto?
Un
transecto es un perfil, que se recorre a pie con fines de apropiarnos de lo que
hay en cada una de las capas y niveles del suelo: plantas, animales, minerales,
altura, temperatura, sitios arqueológicos, sitios históricos, etc. Posee todas
las características y principios de los senderos y algo más. Son todos en forma
perpendicular al río Santiago y sirven para construir conocimiento preguntando.
Al
paso de los senderos, se pueden hacer esquemas y dibujos, tomar fotografías y
notas que sirvan para conocer a profundidad lo que ahí se esconde. Las
preguntas que se lanzan son más agudas y profundas, y se camina lento, sin
prisa, “con un ojo al gato y otro al garabato” para observar con detenimiento el
paisaje, sus adentros y exteriores. No se sigue un sendero, sino la cuenca de
algún arroyo o río, por lo que el transito es en cierta medida difícil y hasta
peligroso. Se va de los 1000 msnm hasta los 1600 msnm en algunos casos, se
requiere mayor inversión de tiempo, llevar agua, alimentos, calzado y ropa
apropiada.
Con
el fin de aprovechar más el tiempo, se recomienda acercar los participantes en
vehículo lo más posible y nunca recomendar estos recorridos sin guía
experimentado. Cabe señalar que además de las cuenca aquí enunciadas podemos recorrer
las cuencas del Río Blanco, Agua Prieta, Agua Zarca (Copala-Los Camachos) y el
arroyo grande de Milpillas.
1.-
Agua fría-El Rincón.
Parte
desde “El Infierno” hasta el lugar conocido como El Rincón, se requieren botas
de montaña, mochila al hombro y algunas cuerdas para los ascensos difíciles,
ofrece diversidad vegetal, posible observación de animales en su contexto
natural (armadillos, tlacuaches, zorros, aves y especies de reptiles) y
excelentes paisajes, el agua todavía está limpia, y solo se puede transitar
cuando no hay peligro de lluvia abundante.
2.-
Tonitalpa-Los Maguitos
Este
recorrido en perfil parte del tanque de agua poniente de Ixcatán, es
completamente vertical y en 55 minutos (si eres bueno para caminas) podemos
observar el pueblo y la barranca, es necesaria buena condición física, ropa y
calzado de montaña, no es un sendero por donde se transita sino una vereda que
a veces se asemeja a la que usan los armadillos, venados y coyotes. El
recorrido concluye después de pasar el mirador de La Cruz en un lugar llamado
Los Manguitos al pie de la sierra madre occidental, al poniente de Ixcatán,
punto preciso en donde hubo hace tres décadas una pista de aterrizaje para
avionetas.
3.-
Cascada del río La Soledad a la boca del río Santiago
Es
un breve recorrido de tres horas que permite conocer un geiser, un bosque de
palo de Brasil y la forma en que una gran cantidad de agua limpia se mezcla con
la pestilencia que viene de la ciudad. Permite conocer las ruinas de la fábrica
de cal La Soledad y la cascada con su agua todavía limpia y las corrientes con
peces y escalar sobre la cascada del río.
4.-
Río la Soledad (vado hasta con Los Larios)
Este
recorrido es más largo que el anterior, parte del vado del río la Soledad hacia
el poniente, es un ascenso empinado hasta llegar a los enormes cañones ya muy
cerca del valle de Tesistán, se requieren cuatro horas al menos.
Algunos
productos que pueden generarse por los sujetos en los recorridos de transecto:
·
Álbum
fotográfico de plantas de la barranca.
·
Datos
históricos y culturales locales.
·
Referentes
geográficos y antropológicos.
·
Clasificación
de plantas medicinales
·
Manual
etnobotánico para los campesinos y sus invitados
·
Recuento
de arboles frutales y tiempos de cosecha
·
Clasificación
de fauna silvestre estable y en peligro de extinción.
·
Nichos
de la fauna silvestre y los usos alimenticios y medicinales
·
Ubicación
de sitios arqueológicos.
·
Conocimiento
de cuevas y cañadas.
·
Zonas
para acampar con absoluto respeto al entorno.
·
Localización
de leña seca para cocinar.